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sábado, 17 de diciembre de 2011

MARIANO FERNANDEZ BERMEJO EN LA JAULA DE LOS GATOS

MARIANO FERNANDEZ BERMEJO. (13-12-2001)
Fecha: 13 de Diciembre de 2011


A s i s t e n t e s:

Mariano Fernández Bermejo (invitado). Carlos Bravo, Ramón Cervera, Agustín Ruiz, Julen Lopetegui,  Guillermo Llamas, Javier Ruiz de Asín, Manuel García-Hierro, Enrique Barrera, Juan Carlos Villalonga, Gerardo Viada, Jacinto Santos, Miguel Muñoz Calero y Luís Yáñez.

L u g a r: Restaurante LA ANCHA. C/ Príncipe de Vergara, 204 M A D R I D

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Hoy por fin hemos pasado el Ecuador. Aquel acontecimiento de la antigüedad consistente en traspasar esa línea imaginaria equidistante entre los polos de la tierra, era un hito de tal magnitud, que despertaba la admiración y el  reconocimiento de todos hacia aquel que  había llevado a cabo tal gesta. Con el paso de los años el “Paso del Ecuador” se ha ido extendiendo como una expresión coloquial en el campo universitario, en el de la empresa o en el de cualquier proyecto ilusionante. En cada uno de ellos tiene un significado muy lógico y preciso. En la Universidad se utiliza cuando uno supera la mitad de la carrera y en el de la empresa o en el del desarrollo de un proyecto es cuando ambos “han alcanzado la mayoría de edad”, es decir cuando se ha consolidado.


El Foro Jaula de Gatos ha llevado a cabo su “Paso del Ecuador, con nota alta en solvencia y honorabilidad. Virtudes que nos han aportado aquellos invitados que tan generosamente han participado en los coloquios y charlas a los que fueron convocados. A ellos precisamente les debemos el éxito de la difusión de nuestros mensajes a través de la red y de otros medios, que han sobrepasado con creces las expectativas del más optimista.


El año 2011 toca a su fin y trece meses después de aquella primera reunión  un tanto balbuceante, los nueve miembros fundadores en torno a una mesa en el sótano del Café de Oriente de Madrid,  decidimos embarcarnos en esta singladura  sin un rumbo fijo y determinado, pero eso si,  con gran firmeza en el timón  y  un cuaderno de bitácora en el que cada día fuimos anotando minuciosamente los acontecimientos ocurridos en torno este Foro. Hoy las columnas, como si de una logia se tratara,  están más nutridas y compactas que nunca,  y la ilusión y el pensamiento libre  presidirán esculpidas para siempre en el  frontispicio de esta “Jaula de Gatos”,  en la que lo único que se exige a sus miembros es  tolerancia y  respeto hacia los demás.  
Mariano Fernández Bermejo, nació en Arenas de San Pedro (Avila), el 10 de Febrero de 1.948. Licenciado y Doctor en Derecho por la Universidad Complutense de Madrid. Ingresó en la carrera fiscal con el nº 1 cuando contaba solamente 25 años de edad. Es un gran experto en Derecho Comunitario. Desde 1.974 hasta 1.986 pasa por los siguientes destinos, Fiscal en Santa Cruz de Tenerife, posteriormente desempeñó su labor en Cáceres, siendo destinado ya como Teniente Fiscal a Segovia y tres años después en la misma ciudad fue nombrado Fiscal Jefe de la Audiencia Provincial. Desde 1.986 hasta 1.988 colaboró con el entonces Ministro de Justicia, Fernando Ledesma, participando muy directa y activamente en la Reforma de la Legislación de Menores, y es entonces cuando conoce a María Teresa Fernández de la Vega, que colaboraba en el mismo equipo. En 1.989 es nombrado Fiscal del Tribunal Supremo, y en 1.992 asume el cargo de Fiscal Jefe del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, y es en el año 2004 cuando se le nombra Fiscal Jefe de la Sala de la Sección-Contencioso Administrativo del Tribunal Supremo. En síntesis digamos que esta ha sido su actividad profesional.

Su actividad académica también es notablemente amplia, así pues fue Profesor Adjunto de Derecho Penal en la Universidad de Extremadura, Profesor de la Facultad de Derecho de la UNED y Profesor del Centro de Estudios Judiciales.

Cofundador de la “Unión Progresista de  Fiscales”, cuyo objetivo fue el de; “promover la plena realización de los principios, derechos y libertades consagrados en la Constitución Española, así como la defensa de imparcialidad y legalidad, de los derechos sociales, la independencia judicial y satisfacer y proteger a los sectores más marginados de la sociedad”.



En el año 2007 es nombrado Ministro de Justicia sustituyendo a Juan Fernando López Aguilar, y dimitiendo de su cargo dos años después. Precisamente sobre su dimisión se ha especulado en demasía y con escasos y sólidos fundamentos;  desde la  primera huelga de 24 horas de los jueces en la historia de la democracia, de la famosa jornada cinegética en Torres (Jaén) en la que carecía de la preceptiva licencia de caza de la Comunidad Autónoma de Andalucía, de las críticas de Patxi López sobre el tema anterior y del insistente acoso por parte del Partido Popular sobre la misma cuestión y de una forma muy especial por Pedro Jota Ramírez a través del diario El Mundo que el dirige. Estas son algunas de las razones que le llevan a presentar su dimisión al Presidente del Gobierno,  Sr. Rodríguez Zapatero el 23 de Febrero del 2009.

Y pese a la  persecución a la que fue sometido expresó públicamente sobre aquellos que se ensañaron cruelmente con él, “que no tiene sitio para el rencor”;  algo que lo engrandece como persona y pone de manifiesto su gran condición y categoría humana.

Muchas, muchísimas fueron las cosas que nos dijo, nos aclaró un buen número de dudas, despejó incógnitas que para muchos de nosotros parecían irresolubles y sobre todo nos dejó frases que quedarán como máximas por la contundencia de sus razonamientos.

Y esto fue lo que nos dijo:
“Su opinión como jurista acerca de las opciones para la administración de justicia, de si es mejor un “Tribunal o juez profesional” o por el contrario un “Jurado”,  considera que hay casos muy claros en que es procedente y además estima que el Jurado funciona muy bien sobre todo para delitos sencillos e incluso en ciertos delitos de sangre,  sin embargo en  otros es imprescindible y necesaria la actuación de los profesionales de la justicia, fundamentalmente  por la complejidad de los casos y sobre todo con el propósito de que las sentencias sean justas y no puedan cometerse ningún tipo de errores o lo que es peor,  arbitrariedades”.

“Montesquieu, un aristócrata, (Barón),  que era juez de toga, y   que heredó de un tío suyo la sucesión en el cargo, en una época en que era común sustituir a un familiar en el puesto,  tuvo la ocurrencia de pensar y además dejarlo escrito, que fue la separación de poderes del Estado, (Ejecutivo, Legislativo y Judicial),   idea  que no era precisamente suya,  digamos que la recoge del filósofo inglés John Locke, pero eso si,  le da forma y sobre todo  trascendencia,  adelantándose doscientos años a su tiempo, y defendiendo vehementemente el hecho de que la justicia  necesariamente tiene que ser  independiente. Esto como principio es algo que  ninguna formación  política discute hoy en día. Pero el concepto  que nos dejó de  que el juez debe ser independiente, mudo, ciego y sordo y solamente un mero aplicador de la ley, pero en ningún caso legislador, hoy lamentablemente esto no se cumple, por lo cual estamos negando la propia esencia de Montesquieu”.


“El juez no debe acumular más poder que el que ya  tiene, que es mucho, precisamente para evitar que pueda caer  en interpretaciones perversas. Montesquieu propone la elección de jueces transitorios y controlados. La transitoriedad en estos momentos tal y como está el sistema judicial no es posible, y en cuanto al problema de control se plantea el siguiente dilema,   “¿quien controla al controlador?”, y esto es algo que no tenemos resuelto ni aquí ni en ningún sitio, pero no solamente a nivel de los jueces sino en instancias muy superiores, por ejemplo, el Consejo General del Poder Judicial está controlado por el Tribunal Supremo, pero ¿quién controla al Tribunal Supremo?, es una de las grandes asignaturas pendientes y para ello es necesario reestructurar muchas cosas que no tienen una fácil solución”.

“Sobre la expresión dicha en un momento determinado, por un político como Alfonso Guerra, que entonces era Vicepresidente del Gobierno, “Montesquieu ha muerto”, habría que preguntarle a él,  porque la dijo, yo creo que la manifestación fue sacada de contexto y que no fue  más que una frase de un político en un momento determinado. Sin embargo, dicho de una forma coloquial,  pienso que “a Montesquieu habría que hacerle el boca  a boca para resucitarlo”, ya que seguramente podría darnos la  respuesta a muchas de las dudas que hoy  tenemos.

“En relación al Tribunal de las Aguas de Valencia, el más antiguo de los tribunales de España, que dicho sea de paso, cuando todavía sigue vigente por algo será, lo cual justifica por si solo su historia y su vigencia. Este tribunal funciona muy bien en la rápida  resolución de casos que siempre son sencillos, puesto que tanto el juez como los querellantes saben de lo que están hablando y por tanto el fallo se dicta de inmediato una vez oídas las partes en litigio y no admite ninguna discusión. Sin embargo fuera del medio rural, sobre todo en las grandes ciudades, las relaciones humanas se han complicado notablemente, y sobre todo en cuestiones de ámbito impositivo,  mercantiles, bursátiles, ingeniería financiera, etc. la complejidad es tal, que un tribunal lego no puede emitir el fallo de una sentencia de algo que no conoce, para estos casos se necesitan y se demandan jueces expertos y muy especializados  en estas materias”.

“El titular con el  que me gustaría despertar mañana, sería: “Hemos cambiado”. Siendo consciente de las dificultades que ello entraña, que no es nada fácil, pero lo que si tengo muy claro es que no podemos seguir así. La sociedad tiene que dar un golpe de timón y dirigir todos sus esfuerzos para conseguir unos niveles óptimos de libertad y solidaridad, imprescindibles para que la justicia sea auténticamente verdadera”.

“En cuanto a la pacificación del País Vasco y la desaparición definitiva de ETA, en su opinión considera que respetando escrupulosamente  la ley,  son necesarias grandes dosis de “Sentido común”.

“Ante una opinión concreta sobre esa sensación que uno tiene como ciudadano, de que si no hay tiempo ni plazos en la resolución de los conflictos, no hay justicia, considera que la maquinaria judicial es muy compleja y para emitir una sentencia justa es imprescindible desentrañar  a fondo  cada caso en cuestión, y en muchas ocasiones esto resulta largo debido a la necesidad de un estudio en profundidad y de una consulta permanente, a fin de evitar que una mala instrucción ó una inoportuna precipitación puedan conducirnos a un error lamentable. Aunque si está de acuerdo en  que el personal de todos los estamentos judiciales tienen que aplicarse e implicarse  mucho más en la acción de su trabajo. Tampoco se puede perder la perspectiva del tiempo, y sin autocomplacencia de ningún tipo, hay que ver lo positivo de todo  lo que disfrutamos en democracia, que nos la hemos ganado a pulso; hoy tenemos la sociedad más justa que hemos tenido jamás y la justicia forma parte de esa sociedad y en mi opinión creo que hoy  es mejor que la de  épocas anteriores, de eso no me cabe la menor duda”.
“Ante la pregunta de si volvería a ser Ministro de Justicia si se lo ofrecieran de nuevo, respondió con toda sinceridad “que no lo dudaría ni un momento y diría que si”, ahora bien lo que  no cometería serían algunos de los errores que cometió en el tiempo que desempeñó el cargo de Ministro. Dijo que lo que  más le había costado fue aceptar la primera vez cuando se lo  ofreció el Presidente del Gobierno, Sr. Rodríguez Zapatero;  estuvo durante un mes dándole muchas vueltas, pensaba ¿porqué me ofrece este puesto si no me conoce  de nada?, pero al  final decidí aceptar desde la responsabilidad,  con la esperanza de poder hacer cosas que redundaran en beneficio del mundo judicial que para mi había sido toda mi vida. Ahora tenía una oportunidad única. Dimito porque considero que debo hacerlo y se me acepta la dimisión y ya está. Yo jamás le he echado la culpa a nadie de las decisiones que he tomado, las he tomado yo con toda la responsabilidad y como tal lo asumo”.
“Siendo Fiscal Jefe de Madrid en un momento determinado dijo: “Soy de izquierdas y como tal actúo”, efectivamente lo dijo, pero fue  respondiendo a un planteamiento hipócrita de jueces y fiscales. Se ha dicho muchas veces que los jueces y los fiscales no tienen ideología política, lo cual no es cierto, todo el mundo tiene su  ideología. A la hora de analizar  una ley, un conservador y un progresista tienen formas diferentes de interpretación, lo cual pone de manifiesto la forma distinta de pensar de cada uno”.

“La justicia en este país está muy politizada, eso es cierto y precisamente ese es el principal motivo por el que deja de ser independiente. Uno de los principales problemas nace en la constitución del propio Consejo del Poder Judicial, cuyos miembros se nombran por cuota de los  partidos políticos, lo cual  cercena de alguna forma su independencia. La justicia es “per se” un instrumento de conservación, y los jueces en la mayoría de los casos son conservadores en origen, por lo tanto el aparato judicial está montado precisamente para eso para que sea el velante y el  conservador de la ley.  El  ordenamiento jurídico es la síntesis de las Normas jurídicas que rigen y que concretamente  en el caso de España, está inmerso en la Constitución, y los  jueces tienen la obligación de hacer que eso se cumpla. La izquierda lo que tiene que hacer es tratar que la justicia sea solvente y lo más independiente posible, y al mismo tiempo evitar que la política se judicialice”.

“En relación al fuero que tienen los políticos lo ve correcto hasta cierto punto, puesto que la posibilidad de que un policía o un juez pudieran detener a un Diputado o a un Senador en un momento determinado, podrían alterar el juego parlamentario, por ejemplo en una votación de cierta importancia, sacas de la circulación a un miembro de la  Cámara de Diputados o del Senado y  has alterado el resultado final de la votación. De todas formas habría que arbitrar algunas normas para que el que haya cometido un flagrante delito, no sea como es  ahora, que solamente lo pueda encausar el Tribunal Supremo”.

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Nos dejó frases muy rotundas y de gran calado, que cada una de ellas podría ser motivo de un amplio debate; estas son algunas de ellas:

“La independencia judicial solo se justifica por la responsabilidad del que la ejerce”.
“Las “sentencias de autor” son la negación del estado de derecho”.

“La izquierda cuando llega al poder, deja de ser izquierda”.


“Las grandes trasformaciones sociales son provocadas por la izquierda, pero siempre desde la oposición, nunca desde el gobierno”.
“A la izquierda le han quedado pendientes dos asignaturas, “la justicia” y “la prensa”
“El Estado no debe ponerse de rodillas ante ningún poder, por mucha supremacía e influencia que tenga”.

“La crisis unida a la hipocresía social, nos lleva a unos planteamientos individuales muy duros, lógicamente siempre dirigidos al gobierno de turno, que en ese momento ejerza el poder, sin tener en cuenta justificaciones de ningún tipo”.
“Existe un envejecimiento de ideas que nos obligará en un futuro inmediato a la renovación de las mismas”.

“El ciudadano está hoy más indefenso que nunca ante la justicia”.  

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Hoy el invitado no podía haber sido mejor ni más acertado. Mariano Fernández Bermejo, una autoridad sobradamente contrastada en el mundo del Derecho y de la Justicia, que con su pedagógica elocuencia nos fue desvelando y aclarando muchas de las dudas y conceptos esotéricos de ese mundo jurídico que desconocemos la mayoría de los ciudadanos. Y aunque también es bien cierto que la terminología y la jerga judicial es en muchas ocasiones un tanto incomprensible y farragosa, sus sabias  explicaciones nos resolvieron un sinfín de dudas, al tiempo que nos rescataron de ese proceloso mar de dudas en el que estábamos inmersos, consiguiendo gracias a su docta y sencilla didáctica que  a partir de ahora seamos todos un poco menos iletrados.

Expertos juristas miembros de este Foro, coincidieron en que sus exposiciones fueron de lo más brillantes y acertadas.

La tarde transcurrió despacio y lenta, así nos pareció a todos, algo que solamente ocurre cuando el que imparte las enseñanzas mezcla en el crisol de la sabiduría el rigor y la amenidad en una  perfecta simbiosis.

Gracias por todo Mariano, y es para nosotros un honor recibirte como miembro de este Foro.



Por: LUIS YAÑEZ.